domingo, 30 de agosto de 2015

ARIOSTO OTERO - MURALISTA DE LA CIUDAD DE MEXICO


Texto y fotos, Carlos Lázaro

La Ciudad de México es una ciudad que preserva un gran legado artístico en sus muros a partir del movimiento muralista del siglo XX, en el que sobresalieron tres grandes artistas que con sus colores y pinceles ocuparon grandes espacios de edificios públicos, innegable es referenciar en cada crónica sobre pintura y muralismo, a Diego Rivera, José Clemente Orozco y David alfaro Siqueiros. Pero el arte da su lugar a cada uno y aquellos tiempos del muralismo mexicano parecen formar ya parte de un pasado trascendido, frente al que, nuevas corrientes, ideas, estilos y formas han surgido para dar vitalidad al arte en el tiempo, pues el arte, como la vida, se alimenta de los momentos de ruptura y cambio, en donde las formas y estilos no pueden permanecer bajo la misma tónica. El cambio es en todo caso la constante. Muchas cosas han pasado en México después del muralismo, sin embargo los muros son y seguirán configurando los lienzos de cada generación de nuevos pintores.


    Mural Cuatro Elementos - Delegación Álvaro Obregón - Ariosto Otero - CDMX
 
Desde 1980, Ariosto Otero, ha venido marcado los muros con nuevas técnicas, como la del grano de mármol sobre estructura de metal, e imprimiendo al final su discurso muralístico con resinas acrílicas, como lo ha hecho en sus murales del Salón de Sorteos de la Lotería Nacional, y el mural, Los Pueblos no guardan Memoria en  el Metro Xola, así como otro tipo de murales de exterior, hechos de estuco al grafito que son bien identificables al sur de la Ciudad de México, que ha sido ante todo el lugar de la mayor parte de su obra, aunque ha sido un muralista que ha traspasado fronteras y tiene obra repartida por una gran cantidad de países.

El campo no aguanta más - Ariosto Otero - San Nicolás Totolapan - CDMX

La delegación Magdalena Contreras reune varios murales de estuco del artista, entre ellos, "Dioses del Agua" que pintara en el año 2000, "Viaje del Siglo XX" que refiere el paso del tren por el antiguo pueblo de la Magdalena y que dejó de dar servicio hace ya unos años. En la antigua estación del tren, Ariosto Otero completó un extenso mural de estuco de 42 metros de largo por 5 metros de altura. "La Energía y el Espíritu" que definió en el deportivo de San Bernabé Ocotepec, "Identidad y Esclavismo" y en "Gran Círculo de Obreros Libres" ambos realizados en la explanada de la Delegación Magdalena Contreras, y con lo que Ariosto Otero nos reitera que los muros sirven siempre, como desde los inicios del muralismo mexicano, para denunciar abusos.

Fuera Máscaras - Ariosto Otero - Magdalena Contreras - CDMX

Pero también la vida y celebración popular emerge de los trazos de Ariosto Otero, en murales como "Fuera Máscaras" donde el mundo de la lucha libre mexicana es descrito desde el muy particular estilo de Ariosto Otero sobre un par de arcos contiguos a la parroquia de la Magdalena Contreras. También suscribe un homenaje a Salvador Allende sobre un muro de concreto en la colonia Lomas de Padierna, a la vez que condena el bombardeo nazi  de 1941 que arrasó con el pequeño pueblo de Lídice -Liditz- Checoslovaquia, evento del que el antiguo pueblo de San Jerónimo Aculco, toma en homenaje el nombre de Lídice. Sobre este evento Ariosto Otero, concluye en mural en la plaza principal de este pequeño pueblo en San Jerónimo Lídice.

    Mural de la Lotería Nacional - Ariosto Otero - Salón de Sorteos - CDMX

Ariosto Otero, es un muralista de grandes dimensiones y en el antiguo pueblo de San Nicolás Totolapan crea uno de sus grandes murales, "El Campo No Aguanta Más" que se extiende 36 metros sobre la fachada superior del edificio ejidal de San Nicolás y que el artista concluyó en 2003. Magdalena Contreras y su demarcación delegacional ha sido sin duda el lugar donde Ariosto Otero ha tenido como sede principal de sus obras, otra de ellas es "Canto a Juárez" mural muy próximo a la Iglesia de Santa Teresa. Pero sin duda uno de sus murales más recientes, es uno que concluyó en 2008 sobre lo extenso de la fachada del mercado Melchor Múzquiz en la zona histórica de San Ángel y que se titula "De Tenanitla a San Ángel" y en el que vuelve a mostrar su ya dominda técnica de estuco esgrafiado ahora enriquecido con piedra de recinto y piedra de colores, y que constituye un enorme mural de 480 m2.

  Mural de San Ángel a Tenanitla - Mercado Múzquiz de San Ángel - Ariosto Otero - CDMX


Caso curioso entre sus murales, lo constituye el mural "Cuatro elementos" elaborado en 4 columnas de concreto, dentro de las instalaciones deportivas de la Delegación Álvaro Obregón. En 2010 vuelve Ariosto Otero a retomar el colorido de su murales a base de grano de mármol y resinas acrílicas, en el mural "Justicia para todos"y "Campo de Elotes" desplegados en el el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa donde también realizó el mural "Los Héroes caminan sobre el Tzompantli". es 2010 un año muy activo del maestro Ariosto Otero, pues entonces realiza uno de sus grandes murales, para la Lotería Nacional, en su Salón de Sorteos donde crea en 420 m2. "Juego de la Fortuna".



   Mural de la Lotería Nacional - Ariosto Otero - Salón de Sorteos - CDMX

La obra de Ariosto Otero merece ya ser considera como parte del atractivo en espacios artísticos que ofrece la ciudad y como parte de la continuidad del Muralismo Mexicano. Sus murales enriquecen las plazas y salas que ocupan, también han ayudado a dignificar espacios y a establecer vínculos de pertenencia entre los habitantes de las comunidades, sobre todo en Magdalena Contreras, donde se ubica la mayor cantidad de murales de estuco del artista. Si es usted admirador del muralismo y quiere ver algo diferente, no dude en localizar y considerar para su visita a la Ciudad de México, algunos de los murales que Ariosto Otero ha realizado para los habitantes de esta ciudad.



Más información sobre la obra de Ariosto Otero está disponible en su página oficial:

http://www.ariostootero.com/


    Mural de la Lotería Nacional - Ariosto Otero - Salón de Sorteos - CDMX
    Mural de San Ángel a Tenanitla - Mercado Múzquiz de San Ángel - Ariosto Otero - CDMX



EL MERCADO ABELARDO RODRIGUEZ - UN RELICARIO DEL MURALISMO MEXICANO



Texto y fotos, Carlos Lázaro

Muchos de los mercados de la Ciudad de México son lugares que resguardan admirables sorpresas para los caminantes y curiosos que ahí llegan, muchas veces sin siquiera aguardar ese momento de asombro. Cuando encontramos algo que no esperábamos ver, es cuando en realidad tenemos ese momento de la revelación súbita. Pienso que eso podría pasar de vez en vez con las personas que llegan al Mercado Abelardo Rodríguez, en el Centro Histórico de la Ciudad de México.



Uno llega al mercado Abelardo Rodríguez desde el Zócalo de a pie, caminando hacia el noreste, detrás de los antiguos edificios del Colegio de San Ildefonso y del convento de San Pedro y San Pablo, o de otra forma más directa, hoy en día se puede llegar vía la línea 4 del Metrobús, que tiene una parada justo enfrente del mercado, bajo el nombre del Teatro del Pueblo, ya que dicho teatro se encuentra en la parte alta del mercado. Su estructura neocolonial de 1934 -mismo año en que inaugura el Palacio de Bellas Artes-  enuncia ese tiempo en que la arquitectura art decó en boga se enriquecía sobre la búsqueda de elementos nacionalistas provenientes del pasado indígena y colonial. 



El punto relevante de este mercado es que conforma un elemento importante para la historia del movimiento muralista del siglo XX y para el arte mexicano en general. Sobre unos mil metros cuadrados de muros en todo el conjunto, se plasmaron una serie de murales de autores diversos, pero con una raíz común, todos eran colaboradores de Diego Rivera. Este grupo de artistas estuvo conformado por Pablo O’Higgins, Antonio Pujol, Pedro Rendón, Grace y Marion Greenwood, Ramón Alva Guadarrama, más una intervención del escultor y artista plástico estadounidense-japonés Isamo Noguchi, quien en 1935 realizó un mural en relieve en la planta alta del edificio. 



Los murales del mercado Abelardo Rodríguez,  representan un momento en que las ideas del socialismo y la justicia agraria, los ideales de "Tierra y Libertad" provenientes de los ideales emanados de la Revolución Mexicana, habían emergido como un volcán y se plasmaron sobre los muros de los edificios de gobiernos de la Ciudad de México, principalmente. hoy en día representa parte de ese legado de los artístas del siglo XX, mismos que se resguardan y enriquecen el acervo de la Ciudad de México, justo es por tanto añadir que si usted aun no los conoce, tiene ya un pendiente más por conocer en la hermosa CDMX, y por tanto una invitación para recorrer con la vista los murales del Mercado Abelardo Rodríguez. 

















martes, 25 de agosto de 2015

LOS ROSTROS URBANOS DE MARYSOLE WÖRNER BAS EN EL FARO DE ORIENTE

    Peso Muerto - 1989

Texto y fotos. Carlos Lázaro

Marysole Wörner Baz, nacida en 1936 y fallecida en 2014, fue una sorprendente artista mexicana autodidacta que realizó sin duda una obra bien particular en la que es posible apreciar los ecos y clamores de las multitudes, pero también el compartimiento de momentos de gozo y actividades en común que dan sentido y profundidad espiritual a los seres humanos en grupo. Hay reiteradamente la presencia de de la tragedia humana, hay por ello sin embargo una cercanía y una empatía tremenda respecto de su condición y abandono. 

De escultura y pintura está compuesta la muestra Rostros Urbanos que concentra parte de la obra de Marysole Wörner Baz, que llega a sus últimos días de exposición en el Faro de Oriente, un lugar que está cumpliendo sus primeros XV años de existencia, en los que éste icónico centro cultural y faro de las artes que se propone ser una luz, como enuncia su nombre en la promoción de un sitio de gran valor para la cultura de Iztapalapa y su gente. Antes de su muerte, la artista, decidió donar su colección privada a la Fundación Carlos Slim, misma que se encargó de la exposición, para celebrar estos XV años del Faro. 

Esta muestra pone de manifiesto la posibilidad de realizar exposiciones importantes fuera del espectro del centro de la ciudad y sus zonas "más culturales" por así llamarlas, como serían por ejemplo el Centro Histórico o Roma - Condesa y Chapultepec- Polanco o San Ángel - Coyoacán.

Iztapalapa ha sido durante un par de meses escenario magnífico de estos Rostros Urbanos de Marysole Wórner Baz, bajo las luces del Faro de Oriente a la orilla de la calzada Iginacio Zaragoza, salida natural de la Ciudad hacia Puebla, muy cerca del pueblo de Santa Martha Acatitla, en la delegación Iztapalapa. 

Dualidades 1989


                                                              Muro 1993
                                                               el Faro de Oriente - Sala de exposiciones
Lluvia - 1962